AEI BASE SMG404 / BITÁCORA DEL CAPITÁN
LOG IN 015
Si algo es evidente a partir de las observaciones realizadas en el planeta Σ, es que los preparatorianos tienen alma.
Sé que algunos grupos religiosos y de Derechos Humanos terrestres podrán juzgarme por siquiera dudarlo, pero es mi deber como científico someterlo a observación y escrutinio. Y si bien es evidente, hay algunas consideraciones a tomar en cuenta:
Es una especie extremadamente sensible, y aunque todos los miembros de un grupo sean igual de vulnerables, tienden a herirse entre ellos al tiempo que esconden sus propios y privados raspones emocionales.
Son capaces de separar el alma del cuerpo. Cuando están aburridos, tienen hambre, sueño, comieron demasiado, si llueve o si de pronto les entra la gana. Lo que queda en esos momentos es una inútil carcasa similar a los maniquíes de COPPEL*, pero con menos personalidad y gracia. (Quien logre averiguar a dónde van sus almas, seguro gana el premio pangaláctico de ciencias aleatorias)
Son voraces. Como parte del experimento, llevé un libro del poeta terrícola Mario Benedetti titulado "El amor, las mujeres y la vida". Lo coloqué sobre la mesa y un espécimen del grupo de control BETA leyó el título y me pidió llevárselo a casa.
Sospecho que el combo amor y mujeres funciona en el alma de todas las especies de la galaxia.
*Tienda departamental terrestre, que tras la crisis reformista del 2014, se convirtió en un emporio de comercio en abonos, similar a la CHOAM o la OPEP
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